Si estás buscando un reportaje de fotos de Comunión especial, original, diferente y sobre todo divertido, sigue leyendo! Retratar a un niño vestido de Primera Comunión no es retratar a un novio o a una novia, son niños y tienen ganas de divertirse, de pasárselo bien, y de recordar este día con alegría. Estas sesiones de comunión están muy lejos de ser aquellas como las que nos podían hacer a nosotros de pequeños, con estas sesiones de fotos pretendo sobre todo plasmar como es cada niño, que cuando veáis las fotos digáis, ¡esta sonrisa es muy él o ella! o ¡ese gesto es el que más me gusta!. Es decir, que reconozcáis la esencia de vuestros peques en cada foto.
¡Hola! Yo seré la fotógrafa, Arantxa Alcubierre. Soy fotógrafa profesional, y llevo realizando fotografía de retrato más de diez años. Haremos juntas un reportaje de fotos que os transmitan sentimientos cuando ya pasado el tiempo las miréis de nuevo, y sobre todo, fotos en las que reconozcas a vuestro peque, fotos donde veas que es él de verdad.
La sesión de fotos de comunión la solemos hacer sobre todo al aire libre, que es donde el niño suele mostrarse más natural y menos cohibido que en un estudio, aún así os ofrezco la posibilidad de hacerlo en estudio. En este tipo de sesiones en concreto, donde el peque ya va vestido de forma poco habitual, os recomiendo hacerlo en exterior, ya que el entorno, la naturaleza y el hecho de no estar metidos en un lugar cerrado, les hacer actuar de modo más espontáneo. ¡Así que contarme que es lo que queréis y os aconsejo lo mejor!
El precio base establecido son 220€, que supone una hora de reportaje, y la entrega de 20 fotografías impresas en papel fotográfico profesional. A partir de aquí, existe la opción de hacer álbum de diferentes tamaños, incluso recordatorios.
A veces me da la sensación de que compramos cosas sin pensar si realmente las necesitamos, y acumulamos sin llegar a darnos cuenta de todo aquello que no utilizamos. Soy partidaria de acumular, pero solo de acumular experiencias, de VIVIR, de compartir momentos con quienes mas queremos y de vivirlos con uno mismo. Hay situaciones en mi vida que pienso, ojalá este instante lo pudiera volver a vivir, ojalá pudiera recordar a esta persona así, como está ahora. Es ahí cuando siento la necesidad de fotografiar. A lo largo de la vida acumularemos un montón de experiencias, que se quedarán en nuestra memoria, pero si a demás tenemos unas fotografías que nos lleven hasta ellas, las volveremos a sentir una vez más, o dos, o tres...
Cóntactame