Con la magia que tiene la fotografía de poder trasladarnos en el tiempo, y volver atrás para recordar cuando queramos determinados momentos de nuestras vidas, me siento orgullosa por ser yo en quien confiáis, y responsable por ser a vuestro lado parte de la creación de esos recuerdos, por eso siempre lo hago lo mejor que se y puedo, para que tengáis entre vuestras manos un trocito de vuestras vidas para siempre.
Hay familias que les encantan las fotografías, coleccionan fotos y álbumes de familia de cada etapa de sus vidas, y la verdad es que pienso que cuando sus peques sean mayores les encantará tener tantas fotografías de recuerdo, para ver como eran ellos y sus papás, para ver como crecieron y como se divertían juntos.
Disfruto mucho con las sesiones de fotos de familia al aire libre, o cuando las hago en vuestras casas. Son en estas sesiones cuando os sentís tranquilos, más relajados. El hecho de estar en el estudio con los peques para haceros fotos, hay veces que os da un poco de vergüencilla, y preferís fotografías planteadas desde un punto de vista distinto, algo más documental. En este tipo de reportaje de familia llega un momento que casi os olvidáis de que estoy haciéndoos fotos, y os relajáis, y empezáis a disfrutar y a divertiros juntos.